La “Malla de Datos” puede subsanar las deficiencias de los Data Warehouses y Data Lakes. Ayuda a personalizar los productos o servicios que las empresas ofrecen a cada cliente, pues jerarquiza los niveles de datos y, a su vez, hace los procesos más rápidos para las necesidades digitales que demanda el mercado.
En mayo de 2019 Zhamak Dehghani presentaba un nuevo concepto, el Data Mesh (DM), y proponía un cambio de paradigma de cómo pensar sobre los datos y que características debería tener una plataforma de datos moderna. Según define el Cloud Leader, Gerardo Vázquez, Data Mesh es una aproximación socio-técnica y descentralizada, de la gestión y acceso en escala de datos análiticos de una compañía u organización.
El DM divide los datos almacenados en dominios de negocio que contarán con un equipo de profesionales encargado de crear productos de datos para hacérselos llegar a diversas áreas de la organización. Así, los productos de datos se unen entre dominios permitiendo el intercambio de datos sin almacén.
Los principios del Data Mesh
- Gestión independiente de datos: más cómoda y barata vía dominios, sin almacén.
- Datos usables y sencillos como productos: los datos analíticos brindados por los dominios deben tratarse como un producto, y sus consumidores como clientes.
- Plataforma de autoservicio de datos: tanto en el consumo como en la creación de nuevos productos de datos; los miembros de cada dominio pueden acceder a usar los datos.
- El dominio como dueño de los datos: la arquitectura descentraliza la propiedad, control y responsabilidad de los datos desde el equipo de plataforma al equipo responsable del dominio.
- Gobernanza federada: si los datos pueden interoperar entre sí, se crean uniones, se encuentran intersecciones, se realizan gráficos y operaciones a gran escala. Las decisiones están más cerca del dominio.
- Control centralizado: incluye un sistema que recolecta información no dependiente de cada dominio, y la gestión de permisos federados e identidades globales.